La importancia de la suspensión

Tal y como os comentamos hace unos meses, os íbamos a describir en diversos artículo lo que conocemos como triángulo de la seguridad vial, es decir: los neumáticos, los frenos y la suspensión. Sobre los neumáticos os hablamos en este interesante artículo , mientras que os desglosamos los diferentes tipos de frenos de tu coche en este otro.

Como bien has podido imaginar, en este artículo cerraremos el círculo hablando de la suspensión, uno de los puntos clave dentro de la seguridad de nuestro vehículo. La suspensión la forman diversos elementos de carácter flexible que unen las ruedas y los ejes con esas partes de nuestro coche que no tienen contacto con el suelo, su objetivo principal es absorber los impactos que provocan los terrenos irregulares, manteniendo siempre un contacto entre coche y asfalto, aumentando así la comodidad y la seguridad de los viajeros.

¿Qué ocurre si tenemos una suspensión en mal estado?

Muy sencillo, con una suspensión en mal estado nuestro vehículo no se mantendrá pegado al firme, lo que puede provocar que salga despedido en algún resalto de gran tamaño, el motivo es sencillo: el funcionamiento del amortiguador.

El muelle se comprime en el bache o resalto, absorbiendo por tanto la irregularidad del asfalto, al volver a expandirse provoca que el contacto con el suelo sea permanente. Para evitar un continuo ir y venir del muelle, existe la figura del amortiguador, que se expande y comprime de forma simultánea a él, evitando un excesivo balanceo. Dentro del amortiguador además existen dos pequeños cámaras que llenas de aceite se comunican entre sí, intercambiando el fluido con el balanceo del muelle, provocando que el movimiento sea cada vez menor, hasta que finalmente desaparece.

¿Cuándo debo acudir a Talleres Bartolo a cambiar mis amortiguadores?

Como resulta obvio, los componentes de la suspensión del vehículo son unas de las partes del mismo que más desgaste sufren, ya que están permanentemente trabajando para mantener nuestro vehículo pegado al suelo, por eso sufren un envejecimiento que aunque lento y progresivo, también debemos tener en cuenta. El motivo es claro, un excesivo desgaste de algunos elementos afecta directamente a nuestra seguridad, al impedirnos un perfecto agarre.

El desgaste es tan lento y tan paulatino que no suele ser sencillo de apreciar, simplemente nos iremos acostumbrando, aunque en la actualidad se recomienda que cada 20.000 km sean revisados los sistemas de suspensión, así como se aconseja su cambio cada 60.000 u 80.000 km.

Como bien sabes, en Talleres Bartolo seguimos funcionando de forma totalmente operativa, y siguiendo a rajatabla las recomendaciones sanitarias referentes a la crisis del coronavirus. Accede a www.talleresbartolo.com y reserva cita con nosotros en cualquiera de las formas disponibles.

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